La Educación Tecnológica y el campo olvidado
Tuesday, 18 de March de 2008
Las escuelas e institutos tecnológicos agropecuarios se han mantenido como una esperanza: abarcan desde el bachillerato hasta el doctorado y cubren todos los Estados del país. Son 207 de nivel medio superior, 21 de nivel superior y seis de investigación y posgrado.Si el problema actual del campo reside en el cambio de su vocación productiva, habrá que saber inducirlo y dirigirlo para que el campo produzca con rentabilidad y eficiencia, de acuerdo a lo que ecológica y humanamente le es más adecuado y aceptado por los productores.La educación tecnológica agropecuaria ha contribuido a ello, aunque durante la administración 2000-2006, lamentablemente quedó desarticulada. En el proceso de reorganización de la SEP, los Institutos Tecnológicos Agropecuarios, que atienden la educación superior y el posgrado, se mandaron a la Subsecretaría de Educación Superior y se dejaron los Centros Tecnológicos de nivel medio superior en la Subsecretaría de Educación Media Superior, desapareciendo la Subsecretaría de Educación e Investigación Tecnológica, cuando para el modelo tecnológico era importante mantener los tres niveles integrados: la media superior, la licenciatura y el posgrado.En el subsistema tecnológico agropecuario, la licenciatura y posgrado diseñaban modelos de producción vinculados a los mercados. Todos ellos se planeaban de acuerdo a la vocación productiva de cada micro región del país. La Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria, que articulaba los tres niveles educativos, estructuraba esos modelos en sus instituciones de educación superior. La educación no formal agropecuaria se instrumentó, especialmente para las comunidades más pobres, que son las que se manifestaron principalmente en la reciente marcha campesina. El modelo de Educación Tecnológica Agropecuaria y particularmente el de educación no formal tenían como fundamento generar la confianza campesina, logrando no sin esfuerzo, que los líderes naturales de la comunidad creyeran en el promotor, profesional y técnico de la educación tecnológica y viceversa
Este era el elemento sustantivo, "La Confianza Mutua", para facilitar hacer camino hacia la aceptación del cambio tecnológico. En el sexenio 1976-82 se dio esta confianza, que consistía en tocar y ganar el corazón del actor.Es lo que hacían los brigadistas profesionales y técnicos de la Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria. .Los modelos probados, aunados al convencimiento de los actores, fueron el eje dinamizador de la incorporación del cambio tecnológico y de la promoción social endógena en el sector agropecuario.
Tuesday, 18 de March de 2008
Las escuelas e institutos tecnológicos agropecuarios se han mantenido como una esperanza: abarcan desde el bachillerato hasta el doctorado y cubren todos los Estados del país. Son 207 de nivel medio superior, 21 de nivel superior y seis de investigación y posgrado.Si el problema actual del campo reside en el cambio de su vocación productiva, habrá que saber inducirlo y dirigirlo para que el campo produzca con rentabilidad y eficiencia, de acuerdo a lo que ecológica y humanamente le es más adecuado y aceptado por los productores.La educación tecnológica agropecuaria ha contribuido a ello, aunque durante la administración 2000-2006, lamentablemente quedó desarticulada. En el proceso de reorganización de la SEP, los Institutos Tecnológicos Agropecuarios, que atienden la educación superior y el posgrado, se mandaron a la Subsecretaría de Educación Superior y se dejaron los Centros Tecnológicos de nivel medio superior en la Subsecretaría de Educación Media Superior, desapareciendo la Subsecretaría de Educación e Investigación Tecnológica, cuando para el modelo tecnológico era importante mantener los tres niveles integrados: la media superior, la licenciatura y el posgrado.En el subsistema tecnológico agropecuario, la licenciatura y posgrado diseñaban modelos de producción vinculados a los mercados. Todos ellos se planeaban de acuerdo a la vocación productiva de cada micro región del país. La Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria, que articulaba los tres niveles educativos, estructuraba esos modelos en sus instituciones de educación superior. La educación no formal agropecuaria se instrumentó, especialmente para las comunidades más pobres, que son las que se manifestaron principalmente en la reciente marcha campesina. El modelo de Educación Tecnológica Agropecuaria y particularmente el de educación no formal tenían como fundamento generar la confianza campesina, logrando no sin esfuerzo, que los líderes naturales de la comunidad creyeran en el promotor, profesional y técnico de la educación tecnológica y viceversa
Este era el elemento sustantivo, "La Confianza Mutua", para facilitar hacer camino hacia la aceptación del cambio tecnológico. En el sexenio 1976-82 se dio esta confianza, que consistía en tocar y ganar el corazón del actor.Es lo que hacían los brigadistas profesionales y técnicos de la Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria. .Los modelos probados, aunados al convencimiento de los actores, fueron el eje dinamizador de la incorporación del cambio tecnológico y de la promoción social endógena en el sector agropecuario.
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